Somos frágiles por naturaleza aunque nuestra apariencia no lo muestre de esa manera.
Siempre hemos estado lastimados pero nos quebramos cuando caemos en las manos equivocadas. Que esto no te alarme porque lo mejor de quebrarse es que siempre hay alguien que recoge todas las partes y logra encontrar algunas que ni tu habías visto ¿No te parece increíble?
Cuando los japoneses reparan objetos rotos, enaltecen la zona dañada rellenando las grietas con oro. Creen que cuando algo ha sufrido un daño y tiene una historia, se vuelve más hermoso. Esta técnica se llama Kintsugi y ellos le denominan como “el arte de hacer bello y fuerte lo frágil”.
Lo que me encantó de esta técnica es que en lugar de ocultar los defectos y grietas, los acentúan y resaltan ya que ahora se han convertido en la parte más fuerte y bella de la pieza que estaba “dañada”. El resultado es que la cerámica no solo queda reparada sino que es aún más fuerte que la original.
Todo este proceso hace que las antiguas vasijas pegadas sean aún mas valiosas que las que nunca se han roto. -Espero que a este punto, puedas comprender a dónde quiero llegar con esto-.
A veces pensamos que cuando estamos rotos, perdemos valor pero lo que definitivamente no sabemos es que somos mas bellos y valiosos siendo reparados después de haber estado “rotos” y más frágiles que nunca.
Que importante resulta enmendar y entender que el corazón puede repararse con los hilos de amor y con esto se puede volver mas fuerte, ¿no crees?.
Yo soy una vasija rota
Me quebré hace años y con el tiempo, he visto la belleza de estar “rota”. Claro, no ha sido fácil y tampoco rápido, pero el proceso de descubrirlo ha sido lo más importante porque se ha convierte en un aprendizaje.
Estoy segura que tu que me lees también estas roto(a) y aunque desconozco la etapa en la que estás, estoy segura que estás en la mejor. ¿Por qué lo digo? Bueno, porque no necesitas que alguien ya haya recogido lo mejor de ti para que te des cuenta que eres valioso(a).
Independientemente de la situación que estés pasando o hayas pasado, quiero que sepas que serás la luz y el reflejo de alguien más que ya haya pasado algo similar, que esté en el proceso e incluso, con personas que no estén pasando nada similar. Yo diría, crear y mostrar empatía en todo momento.
La diferencia entre las personas que ya pasaron o están en un proceso, serás tú porque tu manera de llevar esa etapa será la diferencia y aunque creas que no lo estás llevando de la mejor manera, créeme que lo estás haciendo lo mejor que puedes (solo se requiere de un poco más de amor propio para aceptarlo).
Hace meses y unas cuantas semanas, pensaba en la importancia de ser susceptibles, empáticos y compasivos con cualquier persona que esté pasando cualquier circunstancia. Por ejemplo: desde una enfermedad, una ruptura amoroso, un duelo y/o cualquier situación de la vida que cause un sentimiento de tristeza y dificultad para salir adelante.
Después de un momento de vulnerabilidad y sufrimiento, siempre hay algo mas grande y es el aprendizaje de la situación y de ti mismo(a). Nunca estaremos preparados para enfrentar una situación que nos exponga a un momento de vulnerabilidad y sufrimiento pero lo que he aprendido es que lo mejor que podemos hacer es aceptar la situación (cualquiera que sea) y sacar lo mejor de cada etapa. Lo sé, se lee fácil y no lo es, pero créeme que es cierto eso de “Dios no te manda una carga que no puedas aguantar”.
A lo que voy con este blog es que debemos de apreciar la belleza de estar rotos y con ese realce que ahora tenemos, sacarle brillo para que nuestro alrededor e incluso las personas que no nos conozcan, puedan admirar esa vasija rota.
Cada vida y cada corazón es una vasija que aunque no se vea rota por fuera, por dentro lo está y no lo puedes ver. Es por esto precisamente que debemos ser empáticos y agradecidos por lo que estamos viviendo. Si, agradecidos sin importar qué porque aunque no lo sepas, hay personas pasando peores cosas que tú y muchas veces, se quejan menos que uno.
“La idea es que cuando algo valioso se quiebra, una gran estrategia a seguir es no ocultar su fragilidad ni su imperfección, y repararlo con algo que haga las veces de oro: fortaleza, servicio, virtud… La prueba de la imperfección y la fragilidad, pero también de la resiliencia —la capacidad de recuperarse— son dignas de llevarse en alto”.
Eres lo mas valioso que tienes, por ende, el precio de tu vasija es invaluable. Eres la vasija rota más preciosa que conocerás en toda la vida.
¿No has sentido que hasta que no te pasa algo directamente a ti o a alguien muy cercano, no logras ves la situación de una manera distinta?.
Ahora que lo veo con otros ojos, el tiempo me ha ayudado a reconocer que hay cosas y personas que se tienen que ir para que seas una persona mas sana y esto podría parecer hasta cierto punto sin sentido pero realmente no lo es.
Ahora te explico: ¿No has sentido que te duele desprenderte de algo o de alguien? Me imagino que si.
El proceso cuesta cuando te has acostumbrado a tener algo que te gustaba y que querías pero solo con el tiempo te darás cuenta que era algo indispensable, es decir, que no era necesario tener. Lo mismo ocurre con las personas, las tenemos, las queremos y hasta llegamos a sentir que sin ellas no podremos continuar pero estamos muy equivocados. Es cuestión de tiempo el darnos cuenta que no las necesitamos para vivir.
Nunca sabes que tan indispensable es algo o alguien hasta que no lo tienes.
Me ha tocado pasar cosas que me han dolido, me han marcado y me han abierto grietas fuertes que con tiempo, amor y paciencia se han pulido y puede que algunas de ellas sean las que hoy en día más brillen en mí. Si a este punto te preguntas: ¿Cómo trabajar en una vasija rota?. Ahora te explico algunos pilares importantes para trabajar en tu propia vasija, tu propia historia…
- No soy culpable – La mente tiene poder y por ello, no debemos alimentarla de culpa, sino de perdón y amor- Cualquiera que sea la situación, tiene solución.
- Perdonar: Normalmente las vasijas rotas tienen que ver con situaciones en donde hay otra persona involucrada. El perdón es clave, debes perdonar a la persona, perdonarte a ti mismo y a los involucrados (si es que hay).
- Soltar: De las cosas más difíciles porque a veces hay algo que nos hace sentir aferrados a algo o a alguien. Después del perdón, es aquí en donde pones a prueba si ya lo hiciste de corazón. Dejar ir eso que te lastimó, soltar ese sentimiento puede llegar a ser uno de los mejores sentimientos: libertad.
- Avanzar: El comienzo de algo es indescriptible. Trae consigo ilusiones, sueños y nuevas metas. Avanzar es comenzar de cero pero con una gran ventaja: aprendizaje y fortaleza.
- Hablar y compartir: Tu historia es importante, única y valiosa. Tu proceso es diferente al de cualquier persona en el mundo y eso te da más realce. El hablar y compartir puede ayudar a las demás personas que te rodean a crear conciencia, respetar y crear empatía de tu historia, de tu proceso.
- Sensibilizar: Una de las fortalezas mas grandes de tu historia será la manera en la que puedas convertir tu aprendizaje en un tema importante en el cuál puedas sensibilizar a los demás. Por ejemplo: el cuidado de las personas al hacer una pregunta. Si, tan sencillo y valioso como eso.
“No temas empezar de nuevo. No empezarás desde cero, esta vez vas a empezar desde la experiencia”.
El mundo nos rompe a todos, y luego algunos se hacen más fuertes en las partes rotas.
Ernest Hemingway
Espero que más allá de haberte gustado, hayas traído a mente cuál es esa zona que debes enaltecer porque estoy segura que sos una vasija rota muy valiosa que vale la pena conocer.
Me encantó! Te felicito Ale!
Me encantó Ale. Concuerdo contigo, todos nos hacemos más fuertes a partir de las experiencias que vivimos. Contar nuestra historia nos libera y ayuda a muchas personas a nuestro al rededor a no sentirse solas en un momento difícil y a ver qué es posible salir de eso. Un abrazo!